Si por algo se diferencia España es por su rica y variada gastronomía. Esa que hace que comerte un bocata no sea simplemente comerte un bocata, sino algo más. Que suponga conocer una tierra o región y deleitarte con los distintos sabores y condimentos que ese lugar te ofrece a través del “arte entre dos panes” como describe el libro que lleva el mismo título.
Esta semana queremos mostraros recetas diferentes y recomendaciones de esos bocadillos, bocatas o pepitos que han conquistado durante décadas los paladares de los españoles, habiéndose convertido así en esos platos clásicos que han marcado a muchas generaciones, y que podrás encontrar en cualquier lugar.
Pepito de ternera, un clásico lleno de sabor que nunca falla
El pepito de ternera es un bocadillo caliente originario de nuestro país que suele elaborarse con pan francés (barra o baguette) y carne de ternera a la plancha o frita y/o con ajo laminado. Por regla general la carne utilizada es la de solomillo. Es uno de los bocadillos más populares en las cafeterías y bares de algunas zonas de España, como Madrid o Andalucía.
Sabor, nostalgia, historia y gastronomía es lo que se encierra en este plato que ya es un imprescindible dentro del panorama culinario español. Seguro que muchos de vosotros habéis pronunciado su nombre alguna vez en la barra de algún bar de la capital.
Y es que el pepito como tal nació en el antiguo café de Fornos de Madrid. Uno de los hijos, que más tarde fue sucesor del fundador de la casa, se llamó don José Fornos, conocido familiarmente como Pepito. Siendo niños, tenía costumbre merendar un bocadillo de carne caliente al que algunos amigos primero y muchos clientes después, dieron en pedir bocadillos como el de Pepito, terminando por abreviar y pedir sencillamente un pepito. Hoy se hacen estos pepitos en todos los cafés y restaurantes de Madrid.
La denominación «pepito« se ha convertido en un concepto tan popular que a veces se denomina a cualquier clase de bocadillo. De esta forma los hay de: lomo, pollo, pavo, etc. Algunos de ellos suelen tener algún otro condimento y suele encontrarse también: pepito de ternera con jamón y queso, pepito de ternera con beicon, pepito de ternera con queso y pimientos, … Y hasta se organizan eventos en torno a ellos como el San Pepito.
Receta del mejor pepito
La versión más tradicional del pepito de ternera que se puede comer a todas horas es muy fácil de cocinar. El truco para que nos quede sabroso es elegir un pan que sea tierno y crujiente a la vez y elegir una carne de vacuno tierna y sabrosa como la de Miguel Vergara Angus.
Para su preparación, ponemos la carne con un poco de aceite en un sartén y, mientras hacemos el filete, calentamos el pan en el horno o en una plancha. Cuando los filetes estén hechos a nuestro gusto, les añadimos la sal. Después, abrimos el pan, ponemos un poco de la salsa que nos ha quedado al hacer los filetes, metemos nuestra carne de vacuno, cerramos y ¡a disfrutar!
Al gusto con nuestros ingredientes favoritos
A esta versión clásica podemos añadirle nuestro queso favorito: un semi curado, uno de cabra para un sabor más intenso o el que más nos apetezca. Otra buena idea son unos apetitosos pimientos verdes fritos, unas tiras de bacon, jalapeños en rodajitas, … Y acompañarlo de nuestra salsa predilecta, como mayonesa o mostaza. Lo ideal es añadir estos ingredientes justo al terminar el filete para que, al juntarse, el queso se derrita un poco con el calor y que los demás ingredientes cojan el jugo de la carne. ¿Hay algo más irresistible?
Una versión más gourmet
Esta versión la prepararemos con un pan de chapata que tostaremos previamente con un poco de aceite en una sartén y reservaremos. En esa misma sartén, doramos 1 diente de ajo en láminas y retiramos. Después, marcamos nuestra carne de vacuno por ambos lados y salpimentamos.
A continuación, aliñamos un poco de rúcula con aceite de oliva virgen extra, vinagre de manzana y una cucharada de miel, y guardamos. Restregamos el pan con un tomate, añadimos un chorrito de aceite oliva virgen extra y sal y pimienta al gusto, incorporamos un poco de mostaza y 50 grs. de cebolla caramelizada. Sobre la cebolla, colocamos 4 pimientos de piquillo confitados y cubrimos con nuestra carne de vacuno.
Para terminar, añadimos un toque de lascas de trufa y unas hojas de rúcula acompañadas de ajos fritos. Tapamos con el pan y lo servimos calentito. ¡Un bocadillo delicioso!
Su homólogo valenciano
Desde que su invención hace ya unas cuantas décadas, ya hemos visto que el pepito de carne de vacuno se ha hecho muy popular en las barras de nuestro país, aunque también tiene éxito en Sudamérica, especialmente en Venezuela, donde suelen mezclar las distintas carnes con salsas. Pero ahora vamos a hablar del primo hermano de Valencia, con algo menos de chicha y un poco más de pescado. El pepito valenciano, a base de pisto o titaina.
La titaina, característica de los barrios marineros de Valencia, es una especie de sofrito al que se le añade un atún salado, conocido como tonyina de sorra. Por lo demás, tomate, pimiento rojo, piñones y ajo; todo cocido a fuego muy lento. En otras zonas de la ciudad, también se elaboran pistos con diferentes ingredientes, casi siempre a base de atún y huevo duro. Con esta mezcla se rellena el panecillo, previamente vaciado de miga, que luego se tapona por ambos lados, se pasa por leche y por huevo, y se fríe en la sartén. Digamos que está a medio camino entre la croqueta y la empanada, pero en realidad es un bocadillo.
Aunque su ingesta en esta comunidad se asocia a la Semana Santa, es posible dar con ellos todo el año, ya sea en panaderías o en bares. Se consumen tibios o fríos, dependiendo de si estás sentado a la mesa o te lo quieres llevar de merienda, porque también es válido para cualquier hora del día.
Cómo preparar el pepito valenciano en casa
Hay tantos pepitos como familias, pero a continuación vamos con la receta tradicional que es una oda a la titaina tan sumamente sencilla que cualquiera puede prepararla en casa y a partir de ingredientes fáciles de encontrar. Conviene tener en cuenta ciertas recomendaciones, eso sí. Si por casualidad no encontraras tonyina de sorra, puedes usar migas de bacalao no muy desalado.
Ingredientes para 5 pepitos
Para el relleno de titaina
- 1 kg de tomate de pera maduro
- 6 g de ajo (1 diente)
- 20 g de pimiento rojo
- 20 g de pimiento verde
- 20 g de piñones
- 60 ml de AOVE
- 50 g de tonyina de sorra
- Sal
- Azúcar
Para el pepito
- 5 pulguitas de pan de leche
- Huevo
- Leche
Preparación
Primero picamos el ajo y los pimientos lo más fino posible para arrancar la titaína. A continuación, pelamos y despepitamos los tomates, dejando escurrir el jugo al máximo.
Después sofreímos los piñones, el ajo y los pimientos hasta que estén dorados, añadimos el tomate triturado y sazonamos (Atención: debemos freir la mezcla hasta que pierda casi el total del líquido del tomate).
Ahora es momento de añadir la tonyina, dar hervor y desmenuzar. Haremos un agujero en uno de los lados del panecillo, lo vaciaremos -reservar la miga-, y rellenaremos cada panecillo como si fuera un bocadillo, tapándolo con un poco de miga.
Por último, remojaremos el bocadillo en leche hasta que empape por completo, lo pasaremos por huevo batido y lo freiremos en aceite a unos 170 °C hasta que se dore, tras lo que eliminaremos el exceso de grasa sobre papel de cocina y serviremos.
Bocatas de carne de vacuno con Miguel Vergara
Cualquiera de las anteriores recetas podría pasar a engrosar nuestro listado de recetas veraniegas a base de carne de vacuno y ésta última incluso tener cabida en el post de veraneo gastronómico: platos típicos de carne en España. Sea como fuere, siempre elige la mejor carne de vacuno para cualquier de tus platos. La materia prima es lo más importante y si es de Miguel Vergara, la calidad está avalada. Sólo tendrás que hacer clic en nuestra tienda online para disfrutar de cortes de carne tiernos y sabrosos que incluir en tus bocatas o en otras de tus elaboraciones.
